miércoles, 29 de mayo de 2024

Reflexiones

• Claro que duele, pero dolerá más o menos dependiendo de cómo te trates a ti mismo y te acompañes en ese dolor.

• Cuando alguien ha aprendido el hábito de hiper focalizarse en una versión de ti, difícilmente va a poder ver alguna más. 

• Lo malo de subir a la nube es que después la caída duele mucho más.

• Soy lo que soy, y ya he desperdiciado demasiadas vidas tratando de ser lo que tú quieres que sea.

• Pero realmente ¿A quién le importa de verdad lo que te pase o los fantasmas que habiten en tu cabeza? Lo único que les importará siempre es que esos fantasmas no les asusten también a ellos.


Tus ojos negros volvieron a irrumpir

ayer tarde en mis sueños

y ahora que sé que has vuelto

y que estás rondando 

de nuevo por aquí

temo lo mismo de siempre

lo mismo que a la vez anhelo:

encontrarme con ellos

en la más oscura de las noches

y no ser capaz de alcanzar a verlos


hasta que ellos me vean

primero a mí



Milésimo septingentésimo trigésimo quinto día sin ti

Desde que sentí tu casa como la mía

no he vuelto a saber lo que es un hogar


Desde que te abrí la puerta de mi casa porque te ibas

jamás la he vuelto a cerrar



Quizás sí


Si sientes que no

quizás sea porque es que no



Preguntármelo cien veces


Me tuve que preguntar cien veces

por qué en verano no nieva

por qué en el desierto no llueve


Me tuve que preguntar cien veces

por qué es imposible que los girasoles

sigan a la luna

o por qué las flores no nacen en diciembre

para morir en abril 


Tuve que preguntármelo

para entender que por mucho que me lo pidas

no puedo darte aquello que no vive en mí 



La pieza perdida


He encontrado la pieza que le faltaba a mi puzzle

la que hacía que nada terminase de encajar


Resulta que no la tenías tú escondida

y que estuvo siempre ahí mismo

perdida detrás del sofá



Cuarenta portazos 


Necesité cuarenta portazos

para entender que te querías ir


y tan solo media vuelta de llave

para entender que

                             en el fondo

yo tampoco me quería quedar



El fin justifica los medios


Después de trescientos cincuenta y un poemas 

resulta que sigues siendo tú

la razón de cada verso


Y entonces comprendo

que tú eres el fin

y la poesía el medio


y no al revés



Regla de tres


Para no ver

cierro los ojos

Para no escuchar

me tapo los oídos


Para no quererte

¿Me arranco el corazón?

1 comentario:

  1. Hola!!! He leído tu blog varias veces y me encanta!! Me identifico mucho con lo que escribe. El de la ansiedad brutal, parecía que lo había escrito yo. Te animo a seguir escribiendo, lo haces genial!! Te había agregado por IG para comentartelo pero creo que no me aceptaste. De todas formas, sigue escribiendo, me encanta leerte😘

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