ni tampoco el último
Que si vas a verle y no sientes un mínimo de nervios en el estómago
es que ya se ha acabado todo
Que lo malo de las familias que te acogen como propias
es que después tienes que aprender a despedirlas
Que a veces viene en forma de beso
otras veces en forma de palabras
y otras de caricias
Que es mágico
porque no lo puedes ver
ni tocar
pero sabes que está
Que nunca vamos a querer ni nos van a querer de la misma forma
Que a veces queremos sin saber
y otras sabemos bien que no queremos
y aún así lo seguimos intentando
Que el «¿Qué más puedo hacer para que me quieras?» es la pregunta más absurda del mundo
porque el amor, si se siente
lo hace sin necesidad de hacer nada
y que no hay demostración de amor más bonita
que dejar ir a quien quieres
para que pueda querer a alguien de la misma forma en que tú lo amas
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