¿Cuántas veces habremos escuchado eso de "el destino decidirá"? Si nos volveremos a ver, si nuestros caminos se encontrarán algún otro día... Él decidirá qué será de nuestras impredecibles vidas. Estamos tan acostumbrados a no tomar decisiones que dejarle la responsabilidad al destino nos parece siempre la mejor opción, como si de verdad confiáramos en que al final acabará dándonos aquello que queremos. Por eso sé que no me sentaré a esperar que te traiga de vuelta, que no volveré a soltar tus manos confiando en que en un par de primaveras volverán a acariciarme, ni te pensaré en voz alta con la esperanza de que alguien pronuncie mi nombre y al escucharlo te acuerdes de mí. Te escribiré cartas con tinta imborrable, te diré que te echo de menos como la nieve al más frío de los inviernos, y te abrazaré de la forma más cálida que un verano jamás supo llegar. Que si me lo preguntas te diré que sí, y si me miras encenderé fuegos que ninguna lluvia de abril podrá apagar. No te apartaré la mirada, nadaré en ella como si buscara la luna entre un millón de estrellas. No me callaré cuando te necesite, ni esperaré a que tengas ganas de quererme. Te invitaré a tomar café y pediré tarta para que te quedes más tiempo. Nos despediremos en la esquina y cuando la farola se apague será la señal de valentía para robarte un beso y decirte que te abrazaría cien inviernos seguidos y seguiría teniendo frío, solo por no parar de hacerlo. Lucharé porque cada vez que me veas se pare el mundo y nos de tiempo a escoger un sitio donde quedarnos. Haré que nos muramos de las ganas de tenernos y aún así nos parezca insuficiente, hasta no haber un solo centímetro de tu piel que se me pase por alto, ni una noche más corta que la anterior. Que cada vez que te vea volveré con tu olor a casa y dormiré sin haberme quedado con las ganas de decirte que todo lo dejaría en manos del destino, todo, menos a ti, porque a ti te quiero en las mías.
La vida es como un juego de cartas, suerte que yo todavía conservo los comodines sobre la mesa y los ases bajo la manga.
miércoles, 28 de abril de 2021
lunes, 5 de abril de 2021
He conocido a alguien
He conocido a alguien, de ojos ilusionados, de sonrisa tenue pero firme, de manos cálidas como un sol de verano, de brazos que morirían por un último abrazo, de labios que sobrevivirían cien besos sin rasgarse. Alguien con quien hablar hasta tarde, alguien con quien reír sin necesidad de filtros, hasta que duela la mandíbula. De esas personas que cruzarían los siete mares, sobrevolarían desiertos y no volverían cansadas para arroparte y decirte “te quiero” antes de dormir. Pero lo que más me sorprende, es que he conocido una parte de mí a la que abandoné hace mucho tiempo y estaba convencida de que jamás volvería, esa parte testaruda que trata de olvidarte, rellenando cada hueco vacío de mi alma con tiras de pega que nunca sé cuánto durarán, porque en el fondo sigues siendo tú.
He conocido a alguien a quien le diré que no, porque no llevará tu nombre, porque por muy confortables que parezcan sus brazos jamás serán los tuyos, porque por muy infinitos que sean sus besos, jamás sus labios llevarán pintado arriba ese lunar, porque mi corazón terco te sigue guardando en el más escondido de sus huecos. He conocido a alguien que me ha hecho entender que da igual quien venga dispuesto a regalarme el mundo entero, si en ese mundo sigues sin estar tú. Alguien que ha puesto punto y final a cualquier intento de sacarte de mi corazón porque por fin me he declarado vencida en nuestra batalla de recuerdos. Porque nadie podrá darme un abrazo que recomponga mis piezas rotas, nadie podrá darme un beso que me haga temblar de miedo y felicidad al mismo tiempo, nadie podrá sacarme una sonrisa más sincera y nadie podrá quitarme esas tiras de pega para cubrir con sus manos mis huecos vacíos, nadie más que tú. He conocido a alguien y me he dado cuenta de que sólo por revivirnos otra vez, serías esa única persona a la que querría volver a conocer cada día de mi vida, y no me aburriría nunca. Que siempre vas a ser tú, incluso no siendo, y que nunca nadie más será.