jueves, 10 de enero de 2019

Sobre ti

Perdón por quererte. Perdón por ilusionarme contigo. Perdón por encender fuegos cada vez que me miras. Perdón por las veces que me ha temblado el alma cuando me has besado. Perdón por crear castillos de marfil, por escribirte poesías firmadas con tinta negra, por sonreírles a las estrellas fugaces cuando me hablaban de ti. Perdón por ser tan vulnerable a tu amor, por tratar de cuidarte, por querer verte a secas y por querer verte feliz. Perdón por desear pasar el resto de mis alegrías e idilios junto a ti. Perdón por morirme de amor cada vez que te tengo cerca. Perdón por echarte tantísimo de menos cuando estás lejos. Perdón por llegar a estar tan loca como para pensar que quizás tú sientas lo mismo que yo y que alguna vez acabaremos juntos. Perdón por quererte como nadie te ha querido. Lo siento, de veras.


*


Ayer noche cerré los ojos antes de dormir.
Y en mitad de la oscuridad te vi.
Entre tanto silencio te escuché.
Y me resbalé por el recuerdo de tus manos suaves
con las mías ásperas.
Y me caí.
Y me rompí el corazón.
Y dejé de sentir.
Pero desperté del sueño.
Y te quise una vez más.
Clavel rojo en una explanada de verde.
Venus ocupando todo el cielo.
Te eché de menos.
Te eché mucho más de menos.
Casi como lluvia de Abril.


*


El otro día encontré tu alma tirada
debajo de mi cama
y le pregunté por qué hay noches
más oscuras que el negro de tus ojos.
Ella me dijo que no me dejaría sola,
que todos los interruptores estaban rotos
y no se podía encender una sola lámpara.
Le di la mano antes de dormir,
y me acordé de todas aquellas hadas locas
que alguna vez me dijeron
que el recuerdo no es lo único
que me quedaría de ti.


*


Creo que ya no te quiero.
Ya no tengo las venas obstruidas.
El corazón ha vuelto a su sitio.

Creo que ya no te miento.
Estoy justo en la puerta de salida
y frente a mí miles de libros.

(Que no hablan de ti)

No hay comentarios:

Publicar un comentario